Corrector: Radak
Capítulo 195: Cita Perfecta
El momento en el que la puerta fue abierta, Hermano mayor Hao quedó perplejo. Con una mano en la puerta, sus ojos se ampliaron, y su mandíbula permaneció colgada. Él estaba completamente estupefacto.
Jiang Wen se mantuvo a sí mismo en guardia hacia Yang Chen, luego se acercó corriendo al lado de Hermano mayor Hao. Viendo a Rose tranquilamente sentada, ambos tenían miradas ardientes: “¿Qué piensas, Hermano mayor Hao? Está nena es bastante buena, ¿no?”
Pareció como si Hermano mayor Hao hubiera regresado a sus sentidos al escuchar esas palabras, él estaba lleno de incredulidad y miedo intenso. Él empezó a temblar, y tragó su saliva a medida que rígidamente se giraba para mirar el rostro lascivo de Jiang Wen. Hermano mayor Hao llegó a estar abrumado con furia.
“Tú… Tú maldito… ¡¡Bastardo!!”
Con una voz que era ronca y forzada, Hermano mayor Hao alzó su gran puño, y lo estrelló en el rostro considerablemente atractivo de Jiang Wen!
“¡¡Oww!!”
Jiang Wen se quejó, y la sangre se derramó de su nariz. Mareado, él dio algunas vueltas, luego tocó la sangre caliente que fluía de su nariz. Él prácticamente sollozó a medida que dijo: “¡Hermano mayor Hao! ¡Por qué de repente me golpeas! ¡¡Te estoy pidiendo que trates con esta pareja bastarda!!”
“Pa… ¿¡Pareja bastarda!?”
Hermano mayor Hao sintió un escalofrío correr bajo su espalda, luego levantó su pierna para patear el pecho de Jiang Wen, lo cual hizo que Jiang Wen rodara más de tres metros.
Esta vez, la sangre se derramaba de la boca de Jiang Wen, y otra vez perdió su consciencia.
Este lamentable sujeto fue noqueado por segunda vez en público en tal corto lapso de tiempo.
Hermano mayor Hao tembló a medida que giró y se inclinó. Había una sonrisa en su rostro que se veía aún más fea que llorar, e hizo una risa tonta hacia Rose sin expresiones quien permanecía sentada en el auto.
“Pre… Presidenta… Nunca esperé que fuera usted. Esto es realmente una coincidencia, no reconocí que ustedes eran el objetivo. Si supiera, yo, Ah Hao… No… No…”
“¿No qué?” Rose tranquilamente preguntó a Ah Hao.
Sin embargo, era precisamente un tono tranquilo como ese el cual hizo que Hermano mayor Hao sintiera escalofríos. Él encontraba difícil moverse, era como si su pie estuviera pegado al suelo.
Yang Chen quien estaba de pie al otro lado vio lo que sucedía, y no esperaba que este tipo fuera el subordinado de Rose. Puesto que este era el caso, no planeó hacer nada, él sólo se apoyó contra el capó del auto y esperaba ver cómo Rose iba a resolver esto.
Los delincuentes que seguían a Hermano mayor Hao vieron la anormalidad de la situación y susurraron entre ellos, discutiendo lo que estaba pasando.
Rose suspiró suavemente: “Ah Hao, eres más capaz que yo. Bloquear la carretera con autos, llevar la culpa por otros, golpear personas, capturar mujeres, y causalmente pedir millones. No sabía que tenía un subordinado tan capaz como tú.”
Hermano mayor Hao inmediatamente gritó con un tono de súplica: “¡Presidenta, por favor déjeme explicar! Yo… No tuve elección, ese tipo Jiang es el segundo al mando de la fiscalía en esta área. Solo estoy dispuesto a hacer cosas por él en consideración de nuestros hermanos. ¡El dinero que recibimos también todo es entregado a la sociedad!”
“¿Es aso así? Bien entonces, ¿cuánto entregaste el año pasado?” Rose preguntó con una expresión fría.
Hermano mayor Hao quedó sin habla pues sabía que no podía mentir ya que habían registros financieros de lo que entregaba cada año, así que después de algún tiempo él despacio respondió: “Dos… Doscientos mil…”
“¿Y qué estabas intentado explicar de nuevo?” Rose en forma directa preguntó.
La cabeza de Hermano mayor Hao cayó, él apretó sus dientes y se sintió vencido, pero no pudo encontrar una palabra qué decir.
Rose lo miró fijamente y dijo: “Eres uno de los primeros miembros de la Sociedad Unión del Oeste que desertó a mi Sociedad de las Espinas Rojas, así que no reduje el poder que poseías. Solo eres más inferior que varios líderes de rango alto en la pandilla, y definitivamente puedes colocarte en el top veinte en la pandilla ahora mismo. Sin embargo, nunca esperé que los hermanos que puse en tu mando terminarían cometiendo robo y bloqueando la carretera como unos bandidos. Debes conocer las reglas que establecí, y el camino que estarás acatando de ahora en adelante.”
“¡Presidenta, por favor deme una oportunidad!” Hermano mayor Hao de inmediato se inclinó en reverencia hacia Rose.
“Una oportunidad no es algo que te doy, es algo que necesitas conseguir tú mismo. El hecho que apareciste ante mí hoy significa que esta no es la primera vez que has hecho esto, no puedo seguir haciéndome de la vista gordo contigo.”
Cuando Rose habló, ella sacó su teléfono e hizo una llamada.
“¿Jefa? ¿Cómo puedo ayudarla?” La voz afectuosa de Pequeño Zhao se oyó desde el teléfono.
“Pequeño Zhao, envía a alguien para hacerse cargo del vigésimo primer territorio a cargo de Ah Hao.”
Oyendo estas palabras, Ah Hao quien se arrodilló levantó su cabeza con pánico por todas partes de su rostro.
Pequeño Zhao quien oyó esto estaba ligeramente sorprendido, pero inmediatamente respondió: “Lo tengo, Jefa.” Y no preguntó nada más.
Tras terminar la llamada, Rose miró hacia Hermano mayor Hao: “Te puedes ir ahora, y puedes a llevarte a cualquiera que esté dispuesto a seguirte. Considerando los asuntos en el pasado, no te detendré.”
Hao-ge tragó su saliva, y se puso de pie de modo vacilante. Él sombríamente se inclinó hacia Rose y dijo: “Gracias, Presidenta, yo, Ah Hao, nunca olvidaré su misericordia…”
Diciendo eso, Hermano mayor Hao se dio la vuelta, pretendiendo irse.
Pero en ese instante, Hao giró de nuevo a gran velocidad, y era desconocido cuando fue que agarró una navaja suiza con un brillo frío en su mano. ¡Él de repente se lanzó hacia Rose quien se había callado!
“¡Puta! ¡¡¡Quiero tu vida!!!” ¡Hermano mayor Hao gritó sin piedad!
Yang Chen notó las intenciones de Hermano mayor Hao desde el principio, pero no saltó sobre el auto y pateó a Hermano mayor Hao debido a que sabía que no era necesario.
Justo cuando el puntiagudo cuchillo estaba a punto de apuñalar la garganta de Rose, la mano desnuda de Rose de repente se balanceó, y golpeó perfectamente la muñeca de Hermano mayor Hao!
La muñeca de Hermano mayor Hao se entumeció, y casi dejó caer el cuchillo.
¡Rose agarró la mano entumecida de Hermano mayor Hao, y la torció en la dirección opuesta!
*¡Crack!*
El sonido de huesos desprendiéndose se escuchó, ¡el cuchillo que Hermano mayor Hao estaba agarrando ahora apuntaba hacia él mismo!
¡Pero antes de que Hermano mayor Hao pudiera reaccionar al dolor, su mano la cual Rose agarraba fue balanceada hacía él mismo!
¡El puntiagudo cuchillo apuñaló dentro del pecho de Hermano mayor Hao, perforando su pulmón!
Hermano mayor Hao gimió, y dio unos pasos hacia atrás, y cayó limpiamente en el suelo. Su camisa ya estaba siendo teñida de rojo, y sus labios estaban pálidos. ¡Él yacía sobre el suelo con sus ojos amplios y con dificultad para respirar!
Rose permaneció dentro del auto de principio a fin. Sus movimientos fueron tan fluidos como la seda, y en un abrir y cerrar de ojos, la persona herida en cambio se había convertido en Hermano mayor Hao.
Se dice que las ratas abandonan un barco hundiéndose.
Esta era una mujer que incluso su líder temía y ella lo puso al borde de la muerte en segundos. ¿Cómo podrían ellos posiblemente quedarse más tiempo? Por lo tanto, ellos inmediatamente huyeron a sus autos y se fueron.
Yang Chen también subió de nuevo al auto, cerró la puerta, y encendió el motor, y se fue.
Nadie atendió a los dos hombres que yacían en el suelo. Quizás la policía llegaría más tarde, pero el asesino y la víctima ambos eran miembros de la Sociedad de las Espinas Rojas. Al final, dependería de Rose en cómo el asunto sería resuelto, así que no importaba si era tratado con prontitud o después.
Cuando el auto entró en la autopista, Rose excusándose suspiró, y tímidamente dijo: “Esposito, estoy apenada. Nunca pensé que esto pasaría.”
“¿Por qué dices eso? No es tu culpa por nacer hermosa.” Yang Chen sonrió y dijo.
Rose frunció sus labios y forzó una sonrisa: “Eso no es lo que quiero decir. Me trajiste a una cita por primera vez, pero esto sucedió debido a que no manejé a mis subordinados bien, me siento muy apenada sobre ello.”
“¿Sientes que una cita que empezó perfectamente y tiene un mal final no es satisfactoria, y es deprimente?” Preguntó Yang Chen.
Rose pensó por un poco, luego asintió: “Un poco, pero la vida es así, ¿quien sabe lo que pasaría en el momento siguiente? Solamente podemos aceptar el destino.”
“Ese no es necesariamente el caso.”
Diciendo eso, Yang Chen no condujo hasta la salida de la autopista que estaba cerca al bar, y en cambio salió a la salida más cercana.
Perpleja, Rose preguntó: “Esposito, ¿a dónde estamos yendo?”
“Adivina.”
Rose sonrió y reprendió: “Rara vez siquiera salgo de casa, ¿cómo reconocería otros caminos?”
Yang Chen no le respondió. Él condujo pasando varias calles considerablemente vacías, y condujo hasta alguna parte que estaba bien iluminada. El área tenía muchas tiendas con brillantes letreros y pesado trafico humano. Aunque la carretera esa bastante espaciosa, la vasta cantidad de peatones hacía difícil moverse.
Este era uno de los mercados nocturnos conocidos en Zhonghai, era un lugar que estaría inundado con gente cada noche.
Cuando Yang Chen condujo dentro de las multitudes con el Lotus azul zafiro, de inmediato hubo incontables miradas envidiosas dirigidas a ellos, ya que el auto era una brillante atracción en el mercado nocturno.
Sentada en el auto, Rose se sentía bastante nerviosa. Ella ni siquiera se pondría tan nerviosa si un grupo de personas con ametralladoras estuviera en frente suyo.
En toda su vida, ella nunca había visto tanta gente, y nunca había visto tal bullicioso lugar. Además, ¡ellos se habían vuelto el centro de atención!
¡De repente, Yang Chen detuvo el auto justo en medio del mercado nocturno!
“Esposito, tú…”
Antes de que Rose pudiera preguntar, Yang Chen presionó el botón para abrir el techo del auto.
El auto deportivo Lotus era un cabriolé, así que con sólo presionar el botón, el techo del auto lentamente se reclinó, y se dobló en el cofre.
Inmediatamente, los sonidos de afuera del auto se escucharon. Había gritos, música, tránsito sonando, y todo entró en sus oídos.
Yang Chen y Rose quienes se sentaban en el auto naturalmente ganaron la atención de los alrededores. Sin embargo, como la gente sabía que este auto era probablemente costoso a un gran extremo, la mayoría de las personas mantuvieron su distancia y observaron. Ellos se preguntaban lo que esta pareja de ricos quería hacer.
La belleza de Rose atrajo muchas miradas apasionadas, lo cual hizo que Rose se sintiera incómoda ya que estaba acostumbrada a vivir en la oscuridad. Ella era bastante reservada incluso durante las reuniones con sus subordinados, y rara vez interactuaba con otros. Siendo rodeada por tantas miradas fervientes hizo que su corazón palpitara más rápido.
Las brillantes luces del mercado nocturno iluminaban a los dos, y a toda la multitud de personas.
Yang Chen giró su cabeza, y miró a la incómoda y un tanto impotente Rose con una sonrisa,
“Esposito, por qué estás haciendo esto…” Rose murmuró con un sonrojo. Los muchos rostros que la miraban la hacían sentirse increíblemente nerviosa.
“Debido a que quiero darte una cita perfecta…”
Cuando dijo eso, Yang Chen, se apoyó adelante, y sujetó la exquisita cintura de Rose. Y justo en frente de sus ojos abiertos, besó sus labios…
Por un momento, todos en los alrededores dejaron de moverse, incluso los vendedores ambulantes gritando se callaron, y observaron a esta descarada pareja.
¡Fue solo cuando ella sintió su cálido aliento que Rose llegó a darse cuanta que ella y el hombre que amaba se estaban basando en frente de innumerables extraños!
Ella apartó sus labios con dificultad. Con rubor profundo y delicado jadeo dijo: “Esposito, no seas así, todos están mirando.”
“¿No te gusta cuando te beso?”
“No… No es eso, ¿podrías por favor subir el techo?” Rose suplicó.
Yang Chen sacudió su cabeza: “Si lo subimos de nuevo, entonces ¿por qué comprar un auto como este?”
“Pero tampoco teníamos que bajarlo para besarnos…” Rose estaban tan avergonzada que deslizó su cuerpo bajo el asiento.
Yang Chen frotó el suave y fragante cabello de Rose, luego cálidamente dijo: “Sólo quiero que todo el mundo vea que Situ Rose me pertenece a mí, Yang Chen. Ella no es alguien que solo puede vivir en la oscuridad, no es una personal lamentable que no tiene libertad, y en cambio es una dama feliz que hace a otras damas celosas. Ella es más bella y extraordinaria que cualquiera. La amo, y no tengo miedo que otros se burlen de nosotros.”
Después que dijo eso, Yang Chen otra vez la besó.
Sus labios se entrelazaron, creando una bella vista en el bullicioso mercado nocturno.
Esta vez, Rose no se apartó. Sus hermosos ojos estaban fuertemente cerrados y lágrimas brillantes se derramaban. Era un complejo sentimiento de felicidad y amargura.
Incontables ojos se enfocaron en esta apareja, y parecía que todos en los alrededores habían dejado de conversar. Todo lo que podían oír era la música sonando en alguna tienda.
Después de algún tiempo, algunos jóvenes comenzaron a aplaudir, y poco a poco, los esporádicos aplausos se convirtieron en grupos de persona que aplaudían, y luego casi todos aplaudieron…
Todos los presentes aplaudían para animarlos, y varias parejas jóvenes no pudieron evitar besarse también. La pareja en el auto estaba ya en su propio mundo, y habían olvidado donde en realidad estaban.
Entre la multitud, estas dos personas parecían tan insignificantes.
Pero después de esta noche, algunas parejas seguirían recordaron ese beso en ese auto, en esa noche.