Traductor: SilentDrummer
Corrector: Radak
Corrector: Radak
Capítulo
2 - ¿Dónde Quieres Morir?
El
sol se ocultó bajo el horizonte del Oeste y el día comenzó a oscurecerse.
Solo
entonces, fue que Yao Si levantó las gruesas persianas y dejó salir un suspiro
de alivio. Acechando las calles de abajo que resplandecían con luz, encontró un
abrigo negro y se preparó para salir, pero en ese momento su teléfono sonó de
repente.
Lo
sacó de su bolsillo solo para ver las dos palabras ‘Número Desconocido’ en la pantalla.
Su corazón se apretó y se quedó mirando el par de palabras por unos segundos
antes de respirar profundamente y contestar la llamada.
—¿Hola?
—¿Yao
Si? —Una voz monótona sonó desde el otro lado. Contenía una frialdad que podía
sentirse a la distancia.
Yao
Si sintió que sus tobillos se debilitaron por el sonido.
—Sí…
¡Soy yo!
—Su
certificado de defunción ha sido concedido —La otra persona no tenía ningún
deseo de intercambiar palabras de cortesía y dijo directamente—, el proceso ha
finalizado. ¿A dónde desea que le sea enviado?
—Umm…
—La esquina de los labios de Yao Si palpitó, ella casi lo escuchó como un ‘¿Dónde
quieres morir?’ Aunque todo esto era de esperarse, todavía se sentía como si
estuviera escogiendo un espacio para su tumba—. Está bien, solo envíenmelo. Soy
huérfana así que no tengo familia.
—Okay
—respondió la persona con suavidad. Aún no había subidas ni bajadas en su voz—.
También la verificación que solicitó ha sido hecha y el resultado es quinta
generación.
—Quinta
generación… —Yao Si inmediatamente sintió impotencia. No era necesario decir
que este resultado era muy decepcionante.
—Ahora
mismo son tiempos turbulentos, así que no podemos investigar sobre quien es su
ascendiente[1].
—Está
bien. Estoy acostumbrada. —Ella era huérfana desde pequeña, así que esta vez
era simplemente una ocasión más en que era una.
Quizá
por su aceptación rápida, la voz indiferente tuvo dos segundos de raro
silencio, luego abrió la boca de repente y advirtió:
—La
gran guerra está a punto de comenzar. Es mejor que recién nacidos dispersos
como usted no salgan de casa, de lo contrario ni siquiera sabrá cómo murió.
—Entiendo,
gra…
—Su
identificación ha sido enviada. De ahora en adelante usted es una de los
hematófagos[2].
Sea responsable de sus acciones.
Antes
de que Yao Si pueda contestar, el bip del teléfono sonó. ¿Todos los servidores públicos hematófagos son así de directos?
Yao
Si miró su teléfono por unos segundos sin decir una palabra. En ese momento,
sonó el timbre.
Era
una entrega. Ella firmó de recibido y abrió el paquete. Solo había una tarjeta
con forma de murciélago dentro de la caja y era su identificación. Los
hematófagos en verdad eran eficientes al encargarse de sus asuntos. En la
tarjeta estaba una marca enorme con el número ‘5’, probando que ella era un
hematófago de quinta generación. Bajo el número estaba su número y una larga
serie de números. Ella supuso que era algo parecido a un número de seguro
social.
Revisó
con cuidado la tarjeta de identificación unas veces más antes de meterla en su
bolsillo interior y dejar salir un largo suspiro. Era difícil creer que en un
corto mes había cambiado de ser una humana pura que vivía bajo el sol y era criada
bajo la bandera roja del socialismo a una vampiresa que vagaba en la oscuridad
de la noche y vivía de la sangre, especialmente del tipo que tenía una identificación
oficial.
Su
estómago gruñó otra vez en protesta mientras Yao Si miraba de nuevo el cielo en
el exterior que había quedado completamente oscuro. Sus dientes picaban en la noche
oscura y ventosa. Era hora que ella saliera a comer un poco de… Sangre cuajada
de pato.
╰( ̄▽ ̄)╭
—Hey,
hermana Sisi, llegaste. —Cuando llegaba al mercado, los ojos de hermano Li que
vendía sangre de pato, brillaron. La saludó, la sonrisa vigorosa hizo que su rostro
se arrugue tanto que se veía como un crisantemo.
—Hermano
Li.
—¿Qué
te tomó tanto tiempo hoy?
—El
sol estaba demasiado brillante que no quería salir de casa —respondió Yao Si
despreocupadamente. Se agachó frente el puesto, mirando diligentemente a la
fila de sangre de pato cuajada roja y apetecible, incapaz de prevenir que se le
haga agua la boca.
Olía tan bien, tan bien, tan bien… Ella
se sintió aun más hambrienta.
—¡Ustedes
los recién nacidos!
Hermano
Li rio, con su expresión como la de una
persona que había experimentado todo, sacudió la cabeza. Miró los alrededores,
asegurándose de que nadie pudiera escucharlos hablar. Luego bajó la voz y dijo:
—Al
principio es así, no quieres salir a la luz del día, pero te acostumbrarás
después de un tiempo.
—Sí,
lo sé, gracias hermano Li. —Yao Si asintió. Si no lo hubiera conocido, ni
siquiera se hubiera enterado de que ya no era humana.
Así
es, hermano Li también era un vampiro. Su nombre completo era Li Zheng y fue
convertido mucho antes que Yao Si. Han pasado más de cien años desde entonces.
Ese
día, cuando hermano Li le dijo a Yao Si que ella también era un vampiro, ella
pensó que era un demente y casi llamó a la policía. Sin embargo, unos días
después, ella comenzó a darse cuenta de que las transformaciones que su cuerpo
estaba atravesando encajaban con sus descripciones, hasta el punto de que dos
colmillos retráctiles aparecieron en su boca…
Le
tomó un mes aceptar finalmente la verdad de que ya no era humana. En cuanto a
lo básico respecto a los hematófagos, hermano Li la ha estado poniendo al
tanto. A diferencia de los vampiros en televisión que necesitaban esconderse y
vivir de sangre humana, los hematófagos reales vivían… Vidas muy relajadas.
Aunque
también vivían de sangre, había mucha variedad de donde podían escoger: Sangre
de pollo, sangre de pato, sangre de cerdo, sangre de res… Siempre y cuando sea
sangre, podía consumirse como comida que llenara su estómago. Además, había
todo tipo de platillos particulares que se derivaban de la sangre, siendo la
sangre cuajada de pato la comida para vampiros más común. De ello podía verse
que nadie tomaba sangre humana.
Yao
Si le preguntó a hermano Li por la razón detrás de ello y él la miró como si
estuviera viendo a una idiota. Le respondió:
—¿Has
visto alguna especie que solo coma una clase de comida? Además, ¿es siquiera
consumible la sangre humana en esta época? Hoy en día los humanos comen
toneladas de aditivos, melanina, conservantes, aceite re-manufacturado[3] y
Dios sabe qué más. ¿Qué pasaría si nos envenenamos por beber sangre humana?
—…
Era
tan razonable que a Yao Si no le quedaron palabras para responder.
En
resumen, los hematófagos, a pesar de las diferencias en el estilo de vida,
dieta, y características físicas, no eran tan diferentes de los humanos. Su
sociedad también tenía organizaciones y leyes, del tipo que requería que cada
recién nacido se registre para su identificación.
Si
uno insistía en preguntarle a Yao Si qué era diferente de antes, probablemente
sería que cambió de ser una amante del picante a… ¡Una amante de la sangre
cuajada picante!
—Hermano
Li, dame cinco kilos.
—Enseguida.
—Li Zheng se enrrolló las mangas para escoger algunas frescas para empaquetar.
Mientras lo hacía preguntó—, por cierto, Sisi, ¿llegó tu identificación?
—Ya,
me la entregaron hoy.
—¡¿En
serio?! —Sus ojos de repente se animaron. Llevando una bolsa en las manos,
salió del puesto—. ¿Cuál es el resultado? ¿Averiguaste cuál es tu linaje?
¿Encontraste al bastardo que te mordió?
—No.
—Yao Si sacudió la cabeza, levantando un pedazo de sangre cuajada de pato y
colocándolo en la bolsa en sus manos—. Pero ya he sido verificada, quinta
generación.
—¡Quinta
generación! —Li Zheng se sobresaltó, su rostro lleno de incredulidad—. ¿Cómo es
posible? Te ves como si estuvieras llena de potencial.
—Es
verdad. —Sacudiendo el agua de sus manos, Yao Si sacó de su bolsillo la tarjeta
con el número ‘5’.
Li
Zheng le echó un vistazo, y sus ojos revelaron un poco de compasión mientras le
daba unas palmaditas en el hombro para consolarla.
—No
dejes que muera tu esperanza. Hay ventajas en ser de quinta generación. Al
menos no necesitarás participar en la gran guerra esta vez.
—¿Gran
guerra? —Yao Si se quedó muda de asombro—. ¿Qué gran guerra?
[1] SilentDrummer: Hombre o animal que está una o más generaciones
arriba de su descendiente. En este caso se utiliza como sinónimo de padre.
[2] SilentDrummer: Ser que se alimenta de sangre.
[3] SilentDrummer: Aceite de cocina ilícito, reciclado de residuos de
aceite de restaurantes, desagües, colectores de grasas, residuos de matadero,
etc.