CEO Capítulo 200

7:12 p.m.

Traductor: Trafalgar
Corrector: Radak


Capítulo 200: Tal Vez no es Humano

La casa de Mo Qianni estaba hecha de madera, tenía un total de dos pisos, con plantas trepadoras japonesas creciendo en las paredes.

Una vez que entraron y bajaron sus maletas, Ma Guifang le gritó a Yang Chen: “¡Yerno Yang, estás completamente empapado! Debes secarte primero y cambiarte de ropa. Puedes dormir con Ni-zi en la habitación a la derecha en el segundo piso esta noche.”

“Mamá.” Mo Qianni rápidamente intervino: “Déjame dormir contigo.”

Después de todo, los dos no habían progresado a esa etapa todavía. Una vez que Mo Qianni pensó en dormir con Yang Chen, se volvió tan tímida que de inmediato sonó la llamada de una corneta por retirada[1].

Ma Guifang contestó con una sonrisa: “¿Qué estás diciendo? Ya eres una adulta, ¿cómo podrías estar durmiendo junto con tu madre?”

Antes de que Mo Qianni pudiera idear una contramedida, Ma Guifang amigablemente le preguntó a Ye Zi: “Ye-er, mi casa es pequeña, ¿estarías bien con dormir en mi habitación esta noche?”

Ye-er le dio a Mo Qianni una expresión de “me encantaría ayudar pero mis manos están atadas”, luego asintió felizmente.

Mo Qianni se sonrojó y parecía como una niña mimada hacia su madre, pero Ma Guifang pretendió no verla, y preguntó a Yang Chen: “Yerno Yang, debes tener ropa que ponerte, ¿verdad? Quítate este conjunto y lo lavaré por ti, estarán limpios después de secarse en el sol mañana.”

Yang Chen apreciaba a esta suegra que acababa de conocer, él creía que ella tenía gran visión, pues enviarle a su hija definitivamente era una decisión que no podía ser más sabia.

Los hombres siempre son rápidos en cambiarse de ropa en comparación a las mujeres. Yang Chen subió a la habitación en el segundo piso, y comenzó a cambiarse en ropas limpias mientras observaba los viejos muebles en la habitación. Él se puso una camisa de manga larga y pantalones. Aunque no tenía frío, él parecería más ordinario al cambiarse en ropas como estas.

Cuando bajó a la planta baja, había el olor del aceite y el humo. Mo Qianni por fin había regresado al lado de su mamá, y naturalmente tenía incontables temas para conversar con ella. Por otro lado, la joven Ye Zi preparaba los vegetales silvestres, y de vez en cuando participaba en la conversación. Las tres damas estaban disfrutando de ellas mismas.

No parecía correcto para un hombre adulto como Yang Chen participar en sus conversaciones, así que acercó una silla de bambú y se sentó en el patio. Mirando afuera a la lluvia sin fin, él encendió un cigarro, y esperó perezosamente que la cena estuviera lista.

Mo Qianni quien estaba ocupada tratando con el horno con el trinche para fuego vio a Yang Chen relajándose en el patio con sus piernas cruzadas. Ella maldijo a este tipo por no mostrar buena conducta hacia su madre, e inmediatamente gritó: “¡Yang Chen, ven y ayuda a mi mamá a cortar los vegetales!”

Inesperadamente, antes de que Yang Chen pudiera levantarse, Ma Guifang de inmediato le dijo que se sentara, luego le dijo a Mo Qianni: “¡Tú, niña tonta! ¿¡Cómo puedes pedirle a un hombre que venga en la cocina!? ¡Insensible!”

Siendo regañada por su mamá, Mo Qianni en silencio hizo pucheros.

Viendo a la fuerte mujer de carrera, Mo Qianni, actuar como una niña intimidada fue increíblemente entretenido para Yang Chen, él se sentó allí riendo.

“¡Mami, se está riendo de mí!” Mo Qianni suavemente gruñó hacia Ma Guifang.

Ma Guifang miró a Yang Chen y rio con satisfacción. Ella le dijo a Mo Qianni: “Estaba preocupaba antes en cuanto a qué tipo de persona es mi yerno, pero ahora estoy aliviada. Yerno Yang es un buen hombre, estoy a gusto con él estando junto a ti.”

“¿En serio?” Mo Qianni estaba sorprendida por cómo ellos rápidamente pasaron la prueba, ella tímida y alegremente preguntó: “¿Mami, cómo eres capaz de decirlo?”

“Justo de la forma en la que vinieron. Él cargaba tantas maletas solo, y ni siquiera se cubrió con un paraguas. En la entrada de nuestro pueblo, él estaba ahí de pie completamente empapado, pero no murmuró una sola palabra de queja. Él no intentó ganarse el favor conmigo, y no actuó orgulloso y poderoso. Un hombre como este es simple y confiable. Por lo tanto, Ni-zi, estoy muy satisfecha con el hombre que elegiste.”

Oyendo esto, Mo Qianni miró al Yang Chen deleitándose, y sintió dulzura por dentro. Ella de repente sintió que no había nada de qué estar triste.

Los cielos eran bondadosos hacia él. Yang Chen no esperaba que le gustara tanto a Ma Guifang. ¡Las cosas como cargar las maletas y estar empapado en la lluvia eran nada para él, así que no había razón para que él se quejara! En cuanto a lamerle las botas a su suegra, no es eso lo que no quería hacer, pero realmente no sabía cómo, ¡él tenía miedo de que pudiera lamer el lugar equivocado!

Las tres damas conversaban mientras cocinan con gran eficiencia. Un rato después, ellas trajeron seis platos de la cocina, y Mo Qianni sugirió mover la mesa cuadrada a la entrada así podrían disfrutar de la briza.

De manera que, ellos se sentaron en los aleros, y la bombilla de tungsteno de 40 watts proveía una débil y consistente luz cálida. En la mesa estaba una montaña de pollo, plantas silvestres, y algo de vegetales de la montaña. En una hora donde otras personas estaban durmiendo, ellos tenían su cena.

Ma Guifang trajo una botella grande de licor, y dijo con una cariñosa sonrisa: “Aquí, este es el vino de mamá para ustedes, lo preparé el año pasado. Sabe bastante bien. Estuve cerca de terminarlo, pero cuando me enteré que ustedes estaban viniendo, deliberadamente guardé algo.”

Yang Chen no pudo evitar deleitarse por dentro. ‘¡No es esto genial, ella se considera a sí misma “mi mamá”!’

Mo Qianni estaba sorprendida: “¿Mamá, bebes? ¿Recuerdo que no bebías en el pasado?”

“Oh, ha sido casi una década. Ni-zi, ya eres una mujer adulta, ¿no puede tu madre, yo, cambiar también? cuando una persona no tiene nada que hacer, beber algo de alcohol puede ayudar a tratar con el aburrimiento.”

Las palabras de Ma Guifang sonaron muy casuales, pero cuando Mo Qianni las escuchó, su corazón dolió. Ella sintió que había fallado en acompañar a su madre, y sombríamente dijo: “Mamá, lo siento.”

Ma Guifang sonrió y dio un golpecito en la frente de Mo Qianni: “Niña tonta, ¿sobre qué estás afligida? Ahora que eres exitosa en Zhonghai, me has hecho muy orgullosa. Otras personas también me han alagado por tener una buena hija. Sólo estoy un poco aburrida viviendo aquí sola, no es como que me esté faltando comida o ropa.”

Ye Zi no bebía, así que tranquilamente comió mientras Yang Chen y Mo Qianni se servían un vaso de vino de arroz para ellos mismos.

Al hablar del pasado, Mo Qianni recordó algo importante, y rápidamente preguntó: “¿Por cierto, Mamá, Zhang Fugui volvió?” Ella dejó de prestarle atención a su padrastro quien le daba problemas interminables.

Al hablar de Zhang Fugui, los movimientos de Ma Guifang se detuvieron. Ella suspiró, luego dijo: “Unos pocos días atrás, oí de alguien que regresó que él estaba siendo perseguido por algunos usureros[2], y nunca oí nada mas.”

Ya que Zhang Fugui ya había firmado el acta de divorcio y estaba asustado de Mo Qianni y Yang Chen, él simplemente no se atrevía regresar a casa y pedir dinero. Por lo tanto, había poca o ninguna oportunidad para que en realidad volviera.

Mo Qianni suspiró en alivio, luego alzó su vaso y dijo: “Mami, vamos a brindar por ti por finalmente ser capaz de vivir en paz.”

Ma Guifang felizmente alzó su vaso, y emocionalmente dijo: “Sí, todo está en el pasado. En un abrir y cerrar de ojos, mi hija esta a punto de casarse, estoy vieja, y Yerno Yang ha venido de visita.”

Yang Chen naturalmente amó brindar con su futura suegra. Este vino de arroz hecho en casa era de hecho fragante, él había estado ansiándolo por un tiempo, pues no había probado un vino como este en el extranjero.

“Ye Zi, sólo piensa de esta como tu propia casa, come más.” Ma Guifang dijo a la reservada Ye Zi, y colocó algo de comida en su tazón.

Ye Zi rápidamente le agradeció, luego asentó sus palillos y se levantó: “Yo... Tía Ma, traeré la sopa de champiñones de la cocina, ya debería estar lista.”

“Oh, ve entonces.” Ma Guifang sonrió: “Ye Zi es muy considerada.”

Una vez que Ye Zi entró a la cocina, Mo Qianni le dijo a Ma Guifang: “Mami, estoy volviendo esta vez con la intención de llevarte a Zhonghai. Empaca tus cosas, y sal con nosotros en dos días por favor.”

Ma Guifang suspiró: “Ni-si, Mamá sabe que eres filial, pero ya he vivido aquí por más de cuarenta años, y acercándose a cincuenta. ¿Cómo podría sólo irme de esa manera? Además, incluso si voy a una ciudad grande, sería una completa pueblerina. Ustedes dos tienen trabajos, mientras yo no puedo trabajar realmente. Si sólo me quedo en casa haciendo nada más que come, beber, y tareas domesticas, sería aburrido.”

“Pero este lugar está muy alejado de Zhonghai. Mami, nadie puede cuidar de ti cuando envejezcas aquí, eso me preocupa.” Mo Qianni ansiosamente dijo.

Ma Guifang no era una persona terca. Ella estaba consciente que sin nadie alrededor para cuidar de ella, tendría incontables problemas en sus últimos años. Ella no pudo evitar beber un sorbo de vino en silencio, luego dijo: “Ni-zi, déjame considerarlo. ¿No te estás marchando en al menos unos días? Te responderé cuando llegue el momento, ¿está eso bien?”

Mo Qianni solo podía asentir en respuesta, y puso este tema en espera por ahora.

Yang Chen masticaba los vegetales a medida que tenía un dolor de cabeza por la propuesta de Mo Qianni. Si esta suegra realmente se mudaba a Zhonghai, ¿¡no su relación con Mo Qianni estaría expuesta!? ¡Cuando eso suceda, ella podría ya no ser amigable hacia él, y podría en cambio abalanzarse sobre él con un cuchillo de carnicero en cada mano!

Sin embargo, uno debe ser filial hacia sus padres, así que Yang Chen se contuvo de decir cualquier cosa. ¿¡De quién es la culpa que él sea tan ‘tolerante’ y ‘abierto’ hacia las cosas!?

En este momento, Ye Zi salió de la cocina con una olla de barro. Ella colocó la olla de barro la cual contenía la sopa hecho de hongos silvestres y huesos de pollo en la mesa, y ello despedía una cautivadora fragancia.

Ma Guifang agarró un cucharón, luego tomó el tazón de Ye Zi y lo llenó con una sonrisa: “Aquí, buen trabajo Ye Zi. Ten un tazón primero, luego tú también Yerno Yang. ¡Arranqué estos hongos hoy, son increíblemente frescos! Ten más sopa.”

Como el clima era frío, esta sopa caliente era increíblemente atractiva. Muy pronto, los cuatro tuvieron un tazón de ello y la sopa los confortó en el estómago.

Los cuatro siguieron comiendo y conversando, pero inesperadamente, la gran puerta de madera fue golpeada de repente…

*Toc toc, toc toc*

En el exterior, la puerta de madera tenía un anillo de metal, y este anillo de metal estaba siendo golpeado repetidamente.

“Es tan tarde, ¿quién podría ser?” Mo Qianni preguntó en confusión.

Ma Guifang, ella misma se sintió aturdida por esto, y le gritó a la persona afuera: “¿Quién es?”

Ella había preguntado, pero la persona afuera aún no respondió, y en cambio seguía golpeando.

Una extraña sonrisa destelló en el rostro de Yang Chen: “Sabremos sólo al abrir la puerta, ¿tal vez no es humano, y es un fantasma?”

“¿¡Qué tonterías estás escupiendo!? ¿¡Un fantasma de dónde!?” Mo Qianni en descontento le gritó a Yang Chen, pero era un hecho que estaba oscuro y frío, así que ella se sentía un poco asustada.

“¡Abriré la puerta!” Ye Zi fue valiente, ella voluntariamente asentó sus palillos, salió corriendo del refugio de los aleros y dentro de la lluvia, entonces fue hasta la puerta.

Fue en este momento que Ma Guifang y Mo Qianni de pronto sujetaron sus cabezas al mismo tiempo, y balancearon sus cabezas en dolor.

“Por qué me… Siento tan… Somnolienta…”

Mo Qianni murmuró y su cabeza cayó sobre la mesa con un ruido sordo, ¡Ella se había desmayado!

*¡Thud!*

Ma Guifang también se desmayó sobre la mesa, causando que los vasos caigan al suelo. Afortunadamente, los vasos sólo rodaron en el suelo sin romperse ya que estaban hechos de madera.

Viendo al par de madre-hija desmayarse, Yang Chen no parecía demasiado sorprendido, y en cambio miró hacia la puerta.

En este momento, Ye Zi quien llegó a la puerta estaba a punto de abrirla…



[1] Radak: Como en una guerra.
[2] Radak: Personas que prestan dinero que cargan tasas de intereses extremadamente altas, típicamente bajo condiciones ilegales.

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